lunes, 28 de febrero de 2011

Amor, amor...

Si bien los días creados por los mercadólogos y el comercio para festejar cosas como la amistad, el amor, a la madre, al padre, a los compadres etc.  no me encantan, tampoco puedo decir que soy la típica detractora y que quisiera que desaparecieran. 
El caso es que hoy por todos lados veremos globos, chocolates, rosas, tarjetitas, canciones y otras muchas cosas que los amigos,  novios, esposos y amantes intercambian para decir a aquellos que les son especiales las magicas palabras que nos hacen sentir únicos, felices y afortunados... "Te quiero" 

Tal vez sea cursi, tal vez sea solo una oportunidad de elevar las ventas de los comercios, de llenar los cines, restaurantes y moteles pero yo me pregunto ¿no es mejor eso que oír las noticias de los grupos de autodefensa, de los hechos en Venezuela o la controvertida portada de TIME ?
No es tan malo hacer un alto en el camino y decir  " ¡gracias por estar!, gracias por caminar junto a mi,  por quererme y aguantarme como soy, por tirarme las netas, por reír conmigo y abrazarme cuando lloro;  Por aplaudir mis logros o por decirme " maestra, ahora sí la regaste"; por no juzgarme ni pretender que sea quien no soy.
Los años nos enseñan que existen todo tipo de amigos y amores, cercanos, lejanos,  viejos, nuevos, reales y virtuales y sucede que a veces los cercanos se hacen distantes y los nuevos parecen hermanos .
Sea cual sea el caso,  la conexión especial que sentimos con ellos es mágica y hermosa, y alegra nuestro corazón saber que nos acompañan en la vida.
 Albert Camus dijo:
"No camines delante de mí, puede que no te siga. No camines detrás de mí, puede que no te guíe. Camina junto a mí y sé mi amigo". 

Gracias a todos  queridos, únicos y maravillosos amigos, cada uno de ustedes me ha dado algo especial.  Coincidir y  ser compañeros de viaje es además de un gran regalo de la vida, un placer, un privilegio y un honor


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